Para la construcción de estas nueve casas elegimos una franja del terreno que se ubica al inicio de la loma, elevada aproximadamente cuatro metros sobre un valle delimitado por una serie de lomas pobladas de cactáceas de gran belleza y vulnerabilidad. Sobre esta cota de altura, denominada el Piamonte, se proyectó un muro de piedra de 360 metros de largo, sólo suspendido en dos tramos para dejar paso a los macizos de cactáceas, diseñado con piedra del lugar y con la misma configuración de los paredones viejos, con el fin de que se mimetizara con el entorno y ofreciera la impresión de preexistencia. Todas las áreas de la casa experimentan la presencia del valle y la vegetación a través de aperturas en el muro, diseñadas como huecos y no como ventanas. Así, las casas Piamonte se aprecian desde del valle como un muro con terrazas en su corona, mientras que desde la parte alta de la loma se pierden, mimetizadas en el terreno original.
For the building of these nine houses we chose a stretch of land at the base of a hill, elevated approximately four meters above a valley delimited by a series of low hills covered with very beautiful and vulnerable cactuses. Along this ridge, known as Piamonte, a 360 meter stone wall was projected, suspended in only two stretches where the cactus grow. It is built of stone from the zone and with the same confi guration as the old walls, so that it would blend into the environment and give the impression of preexistence. All the areas of the house experience the presence of the valley and the vegetation through the openings of the wall, designed as gaps and not windows. The Piamonte house is seen from the valley as a wall, with original vegetation of the area on its crown, while from higher up on the hill they cannot be seen, and blend into the original landscape.